viernes, 19 de marzo de 2010

Es casi la una de la mañana y estoy escuchando una banda alemana de rock progresivo que suena demasiado a Dream Theater. Si urgo entre mis enseres, descubro que sólo me apasionan mis propias pasiones. El trabajo inquisidor es a veces necesario, pero mucho más, todavía, lo es amar. Sigo siendo un sucker por los ojos azules. Me gusta reír, y me gusta la lógica de cierto tipo de comedia. La crueldad es a veces un ejercicio necesario. Fumo uno o dos cigarrillos al día. A veces sueño con la piel de mujeres prohibidas. Me gusta perderme en mis lecturas, latir al ritmo de la sintaxis de la frase. Escribir me da miedo. Adoro las fantasmagorías que son puro significante. Mi sentido del olfato está muy poco desarrollado. No sé rimar ni hacer poesía. Me siento orgulloso de haber logrado desaparecer en una pieza para piano. Supongo que la felicidad es una forma de auto-anulación. Me gustaría viajar a Estocolmo. Disfruto mucho del movimiento de mis propias fantasías.

No hay comentarios: